"Scribere me aliquid et devotio iubet"

"Scribere me aliquid et devotio iubet" San Bernardo de Claraval

Ya no le temo al blanco...

"Noto mis palabras libres y a la vez con peso. El peso se lo dan los hechos por los que he pasado, aunque ya se han convertido en alas y plumas que la hacen volar, tan ligera como grave. Sólo ahora que tengo peso, sé volar" Alessandro D´Avenia.

jueves, 7 de marzo de 2013

pero tú, ¿qué buscas? ¿Qué es lo que amas? ¿Por qué darías la vida?


Mi primer hijo habrá tenido 4 ó 5 años, así de alto -¿tienen presente esta altura, cuando a la mesa le ves sólo los ojos? Bueno, imagínenlo aquí, que se le ven sólo los ojos-. Yo estaba corrigiendo, el bello calvario de nosotros profesores de Lengua, y en cierto momento, me di cuenta de que estaba mi hijo; no lo había sentido llegar, no sabía cuánto hacía que estaba allí; había llegado y estaba allí tranquilo observando a su padre trabajar. En esa mirada, ese día, me pareció comprender, de golpe, qué es la educación. Porque ese día mi hijo se acercó a mí sin tener ninguna necesidad particular. No venía a pedirme de beber, de comer, dormir, vestir, estaba allí y me miraba.
 Yo, entrecruzando su mirada, me he sentido atravesado por una pregunta, leí en aquella mirada una pregunta absolutamente radical; era como si mi hijo me dijese: «Papá, asegúrame que vale la pena venir al mundo. Decime que valía la pena venir al mundo. Decime cuál es tu esperanza, por qué te levantás por la mañana y vas a la cama por la noche. Por qué la fatiga del vivir, la muerte, el dolor, la fidelidad, el sacrificio? Cuál es la razón verdadera por la cual me has puesto en el mundo, para que yo pueda llevar el peso de la vida con dignidad, con esperanza, con fuerza? Acompáñame en esto, es la única cosa que te pido».
 Desde ese día, no he podido más entrar en una clase y entrecruzar la mirada de mis alumnos sin sentir esta pregunta: «Profesor, pero usted, ¿qué espera de la vida?» Está aquí toda la cuestión educativa. Sobre todo el resto se puede ser absolutamente libres.

Franco Nembrini

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"Todo yo soy una pregunta a la que no sé dar respuesta"
(P. P. Pasolini)



"Él poseía una ingenuidad que le permitía mirar las cosas de nuevo, como si nadie las hubiese contemplado antes que él. Contemplaba al mundo con ojos nuevos, asombrados".
(L. Jonas)